martes, 20 de enero de 2009

34-B


Era un pervertido , solía mirar los senos de las cortesanas de forma descarada, hasta el punto de que estas al darse cuenta cubrian sus pechos con los chales de satín que tiraban sobre sus hombros para cubrirlos del frio .


Jean philipe Bretó tenía una manía por adivinar las tallas de las damicelas ,poseía un libro , el cual cuidaba con tal recelo como si fuera un tesoro,ese tenía el registro de toda la lencería de las mujeres de la ciudad, desde la aristocracia a la plebe.


Marith Dolchevibou................36-C


Josefin Button.............32-D


Sofia Menetiu............34-B


Los datos yacían de hace años ,como cuando miró por primera vez los senos de Sofía a sus cortos 12 años .Aquella noche la vió después de 5 años .Ella paseaba por la plaza Sallé de Tores, ignoraba todo lo que sucedía a su alrededor , era como si caminase y no viera , ni sintiese nada , Philipe al avistarla corrio de forma atolondrada a su casa , abrió la puerta precipitadamente, hurgó bajo su cama para sacar una caja un tanto vieja , que en su parte superior tenía talladas la iniciales M.V. de su ya difunta madre Marie Strogoff , que en tiempos donde estaba viva y no cuerda utilizaba la caja para guardar sus preciados botones con nombres de sus hijos .
Philipe procedió a meter su dedo indice en un oyuelo que tenía su zandalia y de allí sacó una llave , la introdujo en la cerradura la giró hacia la derecha y con un chirrido abrumador abrió la caja , protó sus manos con anelación y hundió la manos en la caja para sacar un libro polvoriento, lo abrió y sacudió sus viejas y amarillentas hojas, buscó con desesperación la página 139, sacó un lapiz de su bolsillo y procedió a tachar los digitos que se encontraban sucesores al nombre de Sofía para escribir 36-B.